sábado, 5 de mayo de 2012

Bill Conti



Hola a todos:

El pasado 13 de abril  cumplió 70 años Bill Conti. Con motivo de dicho aniversario, dedicamos la emisión del domingo 15 de abril a hacer un recorrido por la vida y obra de este compositor estadounidense, nacido en Providence, capital del estado de Rhode Island, ubicado en la región de Nueva Inglaterra al noreste de Estados Unidos.

De ascendencia italiana, William Conti aprendió a tocar el piano a los siete años con su padre, quien además de saber interpretar el instrumento también era escultor y pintor. A finales de los años 50, Conti se trasladó con su familia a Miami, donde terminó su educación secundaria en el North Miami Señor High School. Allí se convirtió en miembro de la banda y orquesta sinfónica del colegio. Posteriormente ingresó a la Universidad del Estado de Louisiana, donde estudió fagot y se especializó en composición. Luego se trasladó a Nueva York para continuar sus estudios en la prestigiosa Julliard School of Music, y finalmente viajó a Roma para aprender composición de ópera.

Con esta amplia formación académica, sumada a su experiencia personal como intérprete de piano de jazz en clubes nocturnos, Conti se abrió camino en el mundo de la música. La primera banda sonora que compuso fue para una producción británica, Juliette De Sade, película dirigida por Warren Kiefer y estrenada en 1969. Sin embargo, no obtuvo reconocimiento sino hasta mediados de los años 70 cuando el director John G. Avildsen lo llamó para que compusiera la música de Rocky.

Debido a la forma en que está narrada la historia y a su protagonista, un boxeador humilde y solitario que con su sed de gloria intenta convertirse en el nuevo campeón de los pesos pesados, esta película no incluye demasiada música. Tan solo hay unos cortes de tono romántico y variaciones del tema principal. Sin embargo, el enérgico y heroico “Gonna Fly Now” es el acompañante perfecto para la secuencia en la que se ve a Balboa entrenando fuertemente para la batalla final en la que enfrentará a Apollo Creed. 

El tono marcial que ofrecen los metales y la sonoridad propia de la música de la época que mezcla instrumentos de rock como la batería o la guitarra eléctrica con la orquesta sinfónica, dotaron a este tema de grandeza y fue tal su popularidad que alcanzó a ser número 1 en el listado de las 100 calientes de Billboard durante una semana, del 2 al 8 de julio de 1977. Rocky, contra todos los pronósticos, se alzó con el premio a Mejor Película en la entrega número 49 de los premios Óscar. Muchos le atribuyeron este logro a que la historia no tiene un final feliz, pues Balboa sucumbe ante Apollo, y sobre el epílogo lo único que le interesa es tener a su lado a su novia Adriane, interpretada por la actriz Talia Shire, hermana de Francis Ford Coppola.

Fue así como Bill Conti se dio a conocer y se inmortalizó gracias al tema de Rocky. A partir de entonces, el compositor trabajó en varias producciones de Hollywood y también en series televisivas. Compuso la música original de cinco de las seis películas que se hicieron sobre Rocky, exceptuando la número cuatro, estrenada en 1985.

En 1980 compuso la banda sonora de la película Gloria, cinta del actor y director John Cassavetes, protagonizada por Gena Rowlands. Esta es una de las partituras más destacadas del repertorio de Bill Conti. El compositor aplicó en su mayoría un toque urbano y vertiginoso a la música, para las secuencias de acción, pero también hay momentos delicados e intimistas como el tema principal que escuchábamos para cerrar el segmento anterior. Además, se inspiró en el Concierto de Aranjuez de Joaquín Rodrigo para componer este tema y la razón por la cual lo hizo fue el origen español del niño al que cuida Gloria. Por eso se escucha la voz de un cantaor flamenco y, por supuesto, la guitarra acústica. Pero lo más loable del corte es la fusión que hace de este sonido flamenco con la orquesta y un saxofón que expresa en cierto sentido la sensualidad y lado femenino de quien protagoniza la película, Gloria.


En 1981, Conti trabajó en la película Solo para tus ojos, duodécima película de la saga de James Bond, protagonizada por Roger Moore. El británico John Barry se había encargado de la música desde el principio de la saga pero en esa ocasión no pudo hacerlo porque estaba exiliado del Reino Unido. Como es costumbre en las películas de Bond, la banda sonora incluye una canción y el estadounidense compuso una que lleva el mismo título de la película y fue interpretada por Sheena Easton. El tema obtuvo sendas nominaciones en los Globos de Oro y Óscar entregados en 1982.



La década de los 80 fue la más prolífica en la carrera de Bill Conti. En 1984 ganó la estatuilla dorada de los Óscar en la categoría de Mejor Banda Sonora Original por la partitura sinfónica que compuso para la película Los elegidos, cinta del director Philip Kaufman basada en la novela “The Right Stuff” del escritor Tom Wolfe. El filme retrata la historia de siete astronautas de la Base de la Fuerza Aérea de Edwards quienes realizan varias pruebas para superar la velocidad del sonido.

El estilo en que compuso esta partitura fue inspirado claramente en la obra “Los planetas” de Gustav Holst. Dicho estilo dotó de grandeza y de un sentido épico a la música que acompañó de manera adecuada la aventura de este grupo de astronautas. Entre los actores que aparecieron en esta película están Ed Harris, Dennis Quaid y Barbara Hershey. 


En ese mismo 1984, se estrenó Karate Kid, famosa cinta del director John G. Avildsen que narra la historia de un adolescente que luego de mudarse a otro pueblo se mete en problemas con una pandilla de jóvenes que lo persiguen y le hacen la vida imposible. Los Cobra-Kai pertenecen a un dojo de karate y se aprovechan de sus destrezas en artes marciales para maltratar a Daniel. Por esa razón, el joven Larusso decide entrenarse y para ello encuentra al maestro ideal, el señor Miyagi, un hombre mayor proveniente de Okinawa, en Japón, quien le enseña la esencia del karate.

Esta película obtuvo gran éxito al momento de su estreno, tanto así que Noriyuki “Pat” Morita, quien encarnó al señor Miyagi, fue nominado a un premio Óscar en la categoría de Mejor Actor de Reparto. La sabiduría de este hombre que se convierte prácticamente en un padre para Daniel, la amistad que ambos entablan y el karate que le enseña, hacen sumamente atractiva a esta película familiar.

Bill Conti se unió nuevamente a John G. Avildsen, director con quien más veces ha trabajado en su carrera, para esta producción. El músico dividió la partitura en dos partes. Por un lado, están los cortes con sintetizadores que ambientan las escenas de acción. Y por el otro lado están los que tienen la sonoridad oriental, con la flauta pan o zampoña como protagonistas, que acompañan las secuencias en que Miyagi le enseña a Daniel. Para la grabación de la partitura, Conti llevó al mejor intérprete de zampoña en el mundo, el rumano Gheorge Zamfir. 

Conti compuso la música de las siguientes tres películas de la saga de Karate Kid, la 2 y la 3, dirigidas también por Avildsen, y protagonizadas por Ralph Macchio y Pat Morita, y la cuarta que tuvo como protagonista a una joven, interpretada por la actriz Hillary Swank. Estas bandas sonoras no fueron publicadas en su momento y vinieron a ser editadas en un paquete de lujo en 2007, del cual se vendieron tan solo 2.500 copias. 

Bill Conti no solo se destacó en el mundo del cine sino en el de la televisión. De sus bandas sonoras compuestas para producciones de la pantalla chica, la más famosa es la que escribió para la miniserie Norte y Sur, emitida entre 1985 y 1986. Esta producción fue basada en la trilogía de novelas escritas por John Jakes, acerca de la amistad de dos hombres, uno proveniente del norte y otro del sur de Estados Unidos. Las familias de ambos se enfrentan por la Guerra de Secesión de mediados del siglo XIX, pero a pesar de ello conservan su relación.

Durante la segunda mitad de la década de los 80, Conti compuso la música para películas como Réquiem por los que van a morir, Masters of the universe y escribió la partitura para la versión estadounidense de Azul profundo, recordada producción francesa del director Luc Besson sobre la vida de dos buceadores que compiten por aguantar la respiración a grandes profundidades en el océano. La música original de dicho filme fue obra de Eric Serra, quien recibió un premio César por su partitura. Sin embargo, la versión estadounidense fue modificada y el final es diferente, y se contrató a Bill Conti para que compusiera la música. Una rareza y sin demeritar el trabajo de Conti, la música de Serra es superior.

La década de los 90 no fue tan prolífica como la de los 80 para Bill Conti. Sin embargo, produjo algunos trabajos destacados como El año de las armas, Sangre por sangre, Las aventuras de Huckleberry Finn y El secreto de Thomas Crown. Esta última, un remake protagonizado por Pierce Brosnan, estrenado en 1999 es, quizás, su partitura más sólida.

Ya durante lo que va corrido del siglo XXI, el compositor no ha producido casi partituras y se ha dedicado a dirigir orquestas en grandes eventos deportivos o en los premios Óscar, donde ha estado en numerosas ocasiones al frente de los músicos que ambientan la gala más importante de la industria del cine. 

Domingo 15 de abril de 2012 - 8:30-9:00 p.m. (GMT -05:00)
Javeriana Estéreo 91.9 FM - Música sin fronteras en Bogotá o audio en vivo en www.javerianaestereo.com
Escuche el podcast de este programa en el siguiente link: http://www.javeriana.edu.co/javerianaestereo/podcast/index.php?id=5260